"Son tantos años de búsqueda, que hay detalles que no recuerdo", dijo Susana Trimarco en varios pasajes de su declaración, mientras respondía a las preguntas de los abogados defensores. Las audiencias por el juicio en el que están imputadas 13 personas por la desaparición de María de los Angeles "Marita" Verón se reanudaron hoy a las 8.45, con un llamado de atención del presidente del tribunal, Alberto Piedrabuena, por la impuntualidad de algunos de los acusados.
Trimarco respondió las preguntas de Cergio Morfil (abogado de María Jesús y de Víctor Rivero), Hernán Molina (Daniela Milhein, Alejandro González y Humberto De Robertis) y de Marta Toledo (Pascual Andrada). Molina trató de indagar sobre la vida privada de Marita, en un cuestionario difuso y muchas veces reiterativo.
Morfil, por su parte, cuestionó el uso de los subsidios que recibe la fundación María de los Angeles, y sobre investigaciones que realizó Trimarco personalmente, tratando de marcar supuestas contradicciones en el testimonio de la mujer.
Toledo fue la última en preguntar a la mañana, y su corto interrogatorio versó sobre la detención de Andrada (un ex policía riojano acusado de llevar chicas a los prostíbulos de esa provincia), y al secuestro de una agenda del imputado, que contendría teléfonos de gente vinculada al proxenetismo.
La madre de Marita se mostró firme durante toda la jornada, y hasta desafió a algunos abogados. "A mi no me va a confundir, doctor", respondió. A las 18 sigue la audiencia, con las preguntas de los otros abogados defensores. LA GACETA ©